
¡Hola amantes del crimen! Hoy quiero compartir con todos vosotros un tipo de crimen visto en la ficción policial. Se conoce por muchos nombres; habitación cerrada, crimen imposible, la habitación cerrada con llave… Un sinfín de nombres para un tipo de crimen que a mí personalmente me encanta y quiero compartirlo con todos vosotros.
En este tipo de crimen, el asesinato se comete en circunstancias en las que aparentemente, es imposible para el asesino haberlo cometido pero sobre todo, prima el cómo pudo haber entrado y salido.
Para que disfrutéis más de este tipo de crimen, os traigo tres recomendaciones, tres clásicos para que te adentres en ese cuarto cerrado…
Los crímenes de la calle Morgue

Edgar Allan Poe (Boston, Estados Unidos, 19 de enero de 1809-Baltimore, Estados Unidos, 7 de octubre de 1849)
Se produce el bárbaro asesinato de dos mujeres, madame L’Espanaye y mademoiselle Camille L’Espanaye, madre e hija, en un apartamento de una populosa calle de París. Las primeras pesquisas que lleva a cabo la brigada de investigaciones de la policía no dan resultado alguno, evidenciándose la impotencia de la misma para esclarecer los hechos. Finalmente se hace cargo del asunto un detective aficionado, C. Auguste Dupin, quien, tras intensa y brillante investigación, ofrece una explicación extraordinaria.
El misterio del cuarto amarillo

Gastón Louis Alfred Leroux (París, 6 de mayo de 1868-Niza, 15 de abril de 1927)
Clásico de la literatura policiaca y de intriga, en la que su protagonista, el periodista Rouletabille perteneciente a la estirpe del Dupin de Poe y el Holmes de Conan Doyle, se ve enfrentado al reto de despejar un enigma aparentemente irresoluble, como es el de un crimen y la posterior huida del criminal en el interior de una estancia inaccesible.
El crimen de la Canario

S. S. Van Dine, (15 de octubre de 1888 – 11 de abril de 1939)
Esta novela narra el asesinato por estrangulación de una actriz conocida como «La Canario». El desenlace del misterio es sorpresivo, ya que ahí se descubre como hizo el asesino para despistar a la policía.
Aquí tenéis tres clásicos de la literatura del cuarto cerrado. También tenéis a vuestra disposición un relato mío titulado Asesinato a las diez y diez. basado en es tipo de crimen.